El 8 de junio de 1692 en Ciudad de Mexico entre las 4 y las 11 p.m. ocurrio un motin de pan.1 La ciudad se encontraba celebrando la tradicional fiesta del Corpus Christi al mismo tiempo que experimentaba una tension colectiva por la escasez de alimentos basicos como el maiz y el trigo; habia inconformidad en la ciudad porque las autoridades encargadas del abasto estaban especulando con la reserva de granos almacenada en el posito y en la alhondiga. La vida se habia vuelto dificil para los indigenas, mestizos, mulatos y espanoles pobres. El ano anterior se habian malogrado las cosechas del maiz y el trigo debido a inundaciones. Ese dia un grupo bastante crecido de indigenas, se dice que cerca de diez mil,2 se rebelo contra las autoridades urbanas, hecho al que se sumaron algunos mestizos, mulatos y espanoles pobres. La multitud destruyo una parte de las edificaciones gubernamentales, quemo archivos administrativos e incendio los cajones de los mercaderes ubicados en la plaza principal. Este es el acontecimiento que Natalia Silva Prada analiza en su libro La Politica de una rebelion. Los indigenas frente al tumulto de 1692 en la Ciudad de Mexico, editado por El Colegio de Mexico en enero del 2007.