Articulo publicado tambien en el Vol. 21 N° 76. Palabras preliminares. Escribe el notable penalista espanol don Luis Jimenez de Asua, que juventud de hoy cree tener un perfil propio; se siente radicalmente diversa de la madurez imperante; desconfia de las organizaciones politicas y sociales vigentes, y cree llegada su hora de operar. Efectivamente: es la nuestra una epoca en que se acusa con marcado relieve la entusiasta y noble actividad juvenil, que desbordandose de las aulas universitarias en que viviera clausurada antano, se derrama impaciente y generosa por las planicies del mundo a la manera de un suave resplandor de madrugada que se apresura a tenir los horizontes de nacar y de oro, aun antes de que rompa triunfal y perfumada la manana. El estudiante actual ya no espera concluir sus estudios para adentrarse brava y resueltamente en la selva oscura de la existencia, sino que, paralelamente a sus catedras, consagra su energia creadora a todo linaje de actividades sociales, presentandose dondequiera que un dolor reclama el oleo de sus consuelos o un desaliento roto pide la luz de su esperanza. (…)