La continua construccion de conjuntos residenciales cerrados de vivienda en altura, en Medellin en los ultimos anos, no es un hecho aislado producido unicamente por un grupo de inversionistas con el afan de propiciar una dinamica inmobiliaria; sus caracteristicas espaciales actuales, el sistema constructivo utilizado y la tendencia residencial que se ha venido configurando, no solo son consecuentes con los lineamientos de planificacion para esta ciudad, sino que ha sido el resultado del auge de una propuesta de difusion masiva mediante la profusion de dispositivos publicitarios tales como vallas, volantes, revistas de oferta inmobiliaria y apartamentos modelo con los que se ofrece este tipo de vivienda cuyo proposito es construir y mantener un nicho de mercado, generar demanda y posicionar un producto: la unidad residencial cerrada en altura; este elemento urbano es una poderosa herramienta de concrecion en lo real de objetivos en pro de un modelo de ciudad cuyas directrices se evidencian en la publicidad; en el entra en juego el potencial comprador –o grupo meta–, que es persuadido por unas constantes de habitabilidad sugeridas en la publicidad –en ocasiones cuestionable–, que no siempre corresponden con las condiciones de habitabilidad de la vivienda que ya ocupa, sin posibilidad de reclamo en cuanto a garantias de funcionamiento del edificio, porque este canal de reclamacion no se ha construido. Este articulo presenta, por lo tanto, los lineamientos de planificacion y el modelo de ciudad que en el aspecto residencial ofrece la publicidad, y la falta de correlacion entre esas constantes de habitabilidad que se le ofrece al potencial comprador, que el percibe y acepta y las condiciones espaciales en las que finalmente habita.