La democracia, segun se argumenta, debe incentivar el cumplimiento de los deseos de los ciudadanos. En paises donde la mayoria de los electores tienen ingresos bajos, esto implica que la democratizacion deberia llevar al Estado a elaborar politicas publicas para combatir la desigualdad social -lo que este estudio denomina como el dividendo democratico. No obstante, mientras el acceso a la educacion, la salud y las pensiones de vejez ha aumentado en Centroamerica, el cambio politico no ha reducido la desigualdad. Fuera de Costa Rica (y, en menor medida, en Honduras y Panama), los Estados hacen poco para disminuir la brecha entre ricos y pobres en Centroamerica. Este estudio desarrolla modelos estadisticos para explicar por que los Estados de la region tienen distintos niveles de gasto social, sugiriendo que el gasto en educacion, salud y pensiones de vejez esta en funcion de los anos que un pais ha sido democratico. Este estudio tambien identifica como los sistemas partidistas inmaduros y las estructuras estatales debiles son rasgos de los paises con democracias jovenes, y los motivos por los cuales estos son los mecanismos claves para explicar la carencia de un dividendo democratico en el istmo.