El hombre posee en el fondo de su ser un deseo natural de ver a Dios. Para poder realizar este anhelo natural, siendo una criatura finita y contingente, necesita transcender y volverse a su Creador, algo que solo conseguira, esencialmente, en la otra vida. Entonces, ?como gozar anticipadamente en esta tierra de la vision de Dios? El en su bondad dispuso que aun in via el ser humano pudiese encontrarlo a traves de la experiencia mistica, gratuitamente concedida. Y como pedestal para la accion de las gracias misticas, dispuso tambien que consiguiesemos subir facilmente hasta El a traves de la admiracion y la contemplacion de Su infinita e increada Belleza reflejada en las criaturas. Por lo tanto, experiencia estetica y experiencia mistica estan intimamente ligadas entre si, concurriendo ambas para conquistar el alma para Dios. La propuesta es, pues, investigar ese deseo natural del hombre de querer ver a Dios, las caracteristicas y el poder de la experiencia estetica para reportarnos hasta la mistica, y como se da el paso de una hacia la otra.