El punto de partida de la cultura cubana esta en la etica como principio rector de la politica y que nos conduce a destacar el papel de la educacion en el desarrollo y fortaleza de la civilizacion. Eso se traduce en la correspondencia entre el decir y el hacer, en la honestidad como norma de conducta ciudadana, en la toma de partido por los desposeidos no solo de Cuba sino a escala universal.