El pasado reciente colombiano es aun presente y la lectura de un acontecimiento precisa, como afirma Lorenz (2008), de una metodologia que incorpore historia critica, memoria, vivencias, imaginario colectivo, posiciones frente a los hechos e influencia de los mismos en la vida decada persona o grupo. En Colombia se ha venido incorporando el pasado reciente a la ensenanza de las ciencias sociales mediante estandares basicos en ciencias sociales y en competencias ciudadanas, y los textos incluyen la descripcion del conflicto vivido. Pero ?como ensenar a leer el pasado reciente? y ?como ensenar a leer el pasado reciente que aun es presente?. La respuesta demanda una adecuada lectura que aporte, como lo propone Ricoeur (1999), datos, hechos y procesos para la construccion de una memoria, una narracion historica que explique el pasado, y la critica al discurso de esta memoria (1999: 41). Las lecturas de estos acontecimientos y su asimilacion tienen un espacio privilegiado de discusion en el aula de clase, pues alli afloran sentimientos relacionados con la vivencia del conflicto.