Esta carta es para que usted comprenda de donde viene lo que se denomina en estos remotos tiempos del colera, la neurosis obsesiva. La energia que implanto a cada uno de mis rituales pertenece a un unico e indescriptible verdadero amor, que carcome mis entranas, agota mis ganas de persistir ante la incertidumbre de no saber que hacer, al igual que consume mis largas noches en vela, que paso pensativa ante la idea de lo remoto y lo imposible en los arduos tiempos del hoy.