La sexualidad, al igual que todos los demas aspectos de la condicion humana, esta al servicio de las relaciones humanas y no puede ser invocada para dominarlas. La sexualidad no es solamente un fenomeno biologico o fisico accidental a los seres humanos, sino parte integrante de su autoexpresion y de su tarea de autocomunicacion a los demas. Valorar hoy al ser humano de manera integral contribuye al dialogo entre la teologia y disciplinas particulares como la antropologia, la filosofia, la etica, las ciencias sociales, la bioetica, en orden a la promocion sistemica de las personas.