Para los hombres en la antiguedad y aun a la fecha, el corazon ha sido un centro de atencion continua, pero en especial, por su caracter pulsatil permanente. Derivado de esta concepcion, desde los inicios de la historia el hombre vislumbro en el estudio del pulso el acercamiento a una situacion magica y emocional. De su indole batiente se desprende la etimologia. El vocablo mas primitivo que habla del corazon es hrid y corresponde al sanscrito (lengua de los antiguos habitantes de la India, familia indo-europea, 2500 a. C.), el cual paso a ser foneticamente krid o kurd , cuyo significado es organo saltarin, muy cercano a kiruz con que se denomina al ciervo. De ahi evoluciono a kardia (griego), hertz (germano) y cor (latin). En la incipiente medicina tecnica, el corazon se considero el centro de la emocion y de la pasion en la fisiologia circulatoria que se prolongo hasta el Renacimiento. La depresion, que aparece de la mano de la cardiopatia isquemica, no es solo una consecuencia, sino factor de causalidad y asociada a complejos fenomenos neurohormonales y sanguineos, que empeoran el pronostico de la enfermedad coronaria.