Este texto es fruto de una experiencia docente en varias universidades en las que he dictado cursos orientados a la formacion de historiadores y de maestros de Historia. En todas mis clases el uso, la critica y el analisis de fuentes para la investigacion sobre problemas sociales en las variables tiempo, espacio y cambio, son un componente basico, insistente e importante. No hare profundas reflexiones epistemologicas sobre el oficio de historiar; lo que pretendo es consignar una serie de comentarios, a proposito de las fuentes y la investigacion en un contexto como el nuestro, el colombiano, siempre pensando en la funcionalidad que puedan tener para un estudiante que ha comenzado su proceso de formacion por los senderos de Clio. En el fondo, es una reflexion sobre algo que seguramente la mayoria de historiadores sabemos: la concepcion de la historiografia contemporanea que plantea que el Historiador no solamente trabaja con fuentes escritas, como se pensaba hasta hace solo pocas decadas. Es algo ya conocido. Sin embargo, son pocos los textos en los cuales se plantea de manera directa. Si bien puede ser algo obvio para la mayoria de colegas, considero que ejercicios como este son utiles y, sobre todo, necesarios para nuestros estudiantes. Durante los cursos de Teorias y Metodos de la Historia, Paleografia y Diplomatica, Demografia Historica, Historia de Colombia, e Historia de Antioquia, he tenido la posibilidad de recorrer parte de nuestro territorio, consultando archivos, analizando problemas sociales, vinculandolos con la observacion del espacio geografico, e identificando posibles fuentes para la investigacion historica sobre las regiones visitadas. Todo aquello ha servido para orientar el trabajo de los asistentes a los cursos dictados por el autor quienes, con seguridad, han aprovechado