En el resurgimiento urbano y cultural, Bogota se ha colombianizado. Esto implica que deja de ser la ciudad encerrada en supuestos «autenticos» para dar paso a las multiples culturas, estilos, etnias, culinarias, sones, mezclas cromaticas y hasta creencias que la habitan y que, a su vez, representan la vasta y compleja polifonia nacional. El articulo indaga las esperanzas y frustraciones de Bogota, sus miedos y sus perspectivas de futuro, a traves de un prisma que combina innovaciones en infraestructura urbana, nuevas modas musicales y hasta antiguos olores