No ha sido costumbre que en nuestras escuelas medicas y las de muchos otros paises, se consideren los fenomenos sociales como elementos de una dinamica vital, susceptible de sufrir deformaciones o hipertrofias de caracter patogeno. Una larga tradicion de medicina individualista y dentro de esta medicina exclusivamente hospitalaria, se ha desentendido del hecho de que la sociedad es otro ser vivo, con su anatomia, fisiologia, patologia: con la diferencia de que las celulas que la integran, personas humanas, son al mismo tiempo su componente y su finalidad.