El incremento que ha tomado el cultivo del tomate dentro del territorio del departamento del Valle del Cauca, ha mostrado una vez mas la importancia economica que reviste este insecto. El pequeno tamano de la larva hace mas dificil aun despertar en el cultivador el interes que requiere el caso para atacar a tiempo oportuno las medidas de control indicadas. En el estado larval, el insecto se alimenta en el follaje y los frutos. En estos, penetra cerca de la zona del pedunculo y taladra el interior sin ser visto absolutamente, pudiendose constatar su entrada solamente por las diminutas cicatrices que deja en el tejido del epicarpio por donde entro la larva. Los frutos atacados terminan por danarse y no son los apropiados para empacar porque se pudren mas rapidamente que los otros sanos. El nombre de cogollero se le ha dado porque la larva se nota mejor en el apice de la planta, en el punto llamado vulgarmente cogollo, donde se encuentran hojas en formacion y botones florales vecinos, que son atacados por la larvita al alimentarse.