La explotacion minera se caracteriza por la afectacion de la hidrologia subterranea, situacion que se ha considerado como un problema de bombeo netamente tecnico, para evacuar las aguas de drenaje, sin tener en cuenta las implicaciones ambientales. Las aguas de drenaje de la mineria son efluentes liquidos muy contaminantes, dadas sus altas concentraciones de solidos, sulfatos y metales disueltos; ademas, se asocian a elevados valores de acidez que dan a las aguas un alto poder corrosivo. Estos contaminantes generan un deterioro ambiental importante cuando llegan a las fuentes de agua, afectando la biota y la disponibilidad del agua. Las aguas del drenaje acido de minas pueden ser tratadas por medio de procesos fisicoquimicos o biologicos para su prevencion, mitigacion y control. Los tratamientos fisicoquimicos consisten en la aplicacion de un agente neutralizante para remover la acidez y un coagulante para propiciar la precipitacion de los metales disueltos, y otras sustancias y minerales de los efluentes.Tienen la desventaja de ser costosos y generar grandes cantidades de lodos, con los consecuentes problemas asociados a su disposicion. Los tratamientos biologicos utilizan microorganismos o plantas para degradar los contaminantes y disminuir la acidez. Son el resultado de nuevos desarrollos tecnologicos que ofrecen una alternativa economica, sostenible y practica para el tratamiento de este tipo de aguas, presentando altos porcentajes de remocion de los sulfatos y metales, en donde se han logrado valores superiores al 90% en tratamientos con microorganismos de los generos Thiobacillus y Leptospirillum.