Se evaluó la calidad del agua de la cuenca baja del Río Manzanares con el fin de diagnosticar su uso más factible de acuerdo a la normatividad colombiana establecida en el Decreto 3930 de 2010 (valores permisibles establecidos en el Decreto 1594 de 1984, transitoriamente vigente) y la Resolución 2115 de 2007. El agua de la Quebrada Donama presentó las mejores condiciones fisicoquímicas (conductividad, 76 μS/cm; DBO, 2, 8 mg/l; oxígeno disuelto, 6, 52 mg/l; fósforo, 0, 05 mg/l; nitratos, 0, 11 mg/l) y microbiológicas