Desde las diferentes áreas del conocimiento que pretendan ser consideradas como científicas o cuyas teorías pretendan ser validadas, el uso de la estadística toma relevancia. Todo conjunto de datos es susceptible de ser estudiado formalmente con el propósito de convertirlo en información de utilidad al profesional de cualquier campo del conocimiento o al investigador, bien sea para la comprensión de la realidad simple o compleja como también para la gestión y la toma de decisiones. La estadística aplicada al estudio de datos ambientales es un campo muy importante del conocimiento que tiene como propósito el dar soporte objetivo a las interpretaciones de la problemática ambiental y las potencialidades del medio ambiente y los recursos ecosistémicos con que cuenta una población y un territorio. El proceso de conocimiento acerca de un conjunto de datos que reúne un investigador del campo ambiental debe partir de lo simple a lo complejo. Es decir, es necesario realizar estudios descriptivos, como una primera aproximación que busca revelar información oculta en dichos datos. El uso de tablas y la representación gráfica son dos herramientas que dispone el profesional ambiental para resumir e integrar información básica, previo a estudios más complejos. El conocimiento detallado y el buen uso de los procedimientos estadísticos descriptivos le ayudan a garantizar la adecuada aplicación de técnicas que exigen requisitos de obligatorio cumplimiento con ciertas características asociadas con el tipo de datos, la distribución de los mismos, la dispersión o concentración en torno a valores centrales entre otras.