Resumen La protesta social en Colombia ha sido altamente estigmatizada, al considerarse que va en contra de las instituciones democráticas, lo que ha generado un imaginario general de quien protesta es un “guerrillero” o terrorista. Así, el objetivo de este artículo es analizar las construcciones territoriales que han posibilitado la emergencia y permanencia de los imaginarios sociales sobre la protesta social en Colombia, en el marco del Paro Nacional de 2021. Se hace uso de una metodología mixta, con técnicas como el análisis crítico del discurso, cartografía sobre los resultados electorales y la espacialización de hechos de violencia policial en Cali, Bogotá y Medellín. Los principales resultados a los que se llegaron es que la protesta social se dio con pretensión de reclamar por problemas estructurales y no la de derrocar al Estado bajo presión popular; pero la respuesta institucional sí logró incentivar cambios en los imaginarios sociales de la protesta.