Exaltado primordialmente como prócer, el Precursor, Antonio Nariño, fue un hombre erudito, con conocimiento en muchas disciplinas, entre ellas la botánica y la medicina, cuyo conocimiento lo adquirió del sabio José Celestino Mutis. De otra su salud fue precaria y padeció una condición enfermiza que se sumó a sus muchas tribulaciones morales.