La filmografía del portugués Pedro Costa ha logrado convertirse en una obra de arte política más que en una película de crítica política, al concentrar su mirada en la estética y en la voz de los marginados y no en la denuncia social. El filósofo francés Jacques Ranciére, específicamente en su ensayo La política de Pedro Costa, expone que la fascinación y estudio por este cineasta radica en encontrar un desacuerdo entre un régimen estético clásico y otro en el que se puede hacer política a través de imágenes que logran trasmitir la belleza de la naturaleza muerta y de la miseria. A través de un recorrido por algunas películas del portugués, podremos encontrar elementos que explicarán por qué ha creado una nueva forma de narrar y definir el cine político.