El presente artículo tiene como objetivo realizar un análisis del término ἐπιθυμίαι en el Lisis de Platón. Buscamos demostrar que los deseos, a pesar de ser analizados por la tradición desde una perspectiva exclusivamente irracional y negativa, están intrínsecamente ligados a la formación misma de la amistad y son además necesarios e inevitables en la vida del ser humano. Esta relevancia se acentúa al observar lo siguiente: el pasaje 221b (6-7) del Lisis se enfoca únicamente en los apetitos sensibles, mientras que el pasaje 221d (4-5) parece hacer referencia a un tipo de deseo general capaz de guiar adecuadamente los deseos particulares. Resulta curioso que Platón asocie los apetitos sensibles con este deseo general, y que ambos interactúen de manera constante. Pareciera ser –y esto es lo que intentaré demostrar a lo largo del texto– que estos deseos inmediatos desempeñan un papel crucial en la estructuración misma de la amistad. En el contexto de la discusión sobre este tema, encontramos las apreciaciones de Miguel Baró (2008), quien considera que los deseos son nuestra conexión más cercana y esencial en nuestras relaciones con el mundo.