El cáncer de cérvix es el responsable del 7% de las muertes mundiales por algún tipo de cáncer en las mujeres. En la mayoría de los casos se disemina localmente y a través de los ganglios linfáticos. Los distintos genotipos de virus de papiloma humano (VPH) como el 16,18 son los de alto riesgo oncogénico, siendo responsables de las lesiones displásicas del cérvix. El factor de riesgo más importante en la génesis del cáncer de cérvix es la infección persistente por el virus de papiloma humano (VPH) de alto riesgo, el cual es causa necesaria pero no suficiente para la producción del cáncer de cérvix. Para la prevención los dos factores más importantes son la vacunación contra VPH y pruebas de cribado mediante citología.