La inteligencia artificial (IA) se ha convertido en un tópico de moda. Cada organización social, económica y política tiene una visión propia sobre sus alcances y utilidades. En ocasiones colinda con la fascinación y en otras con el temor. Realmente la conocemos mal pues es una innovación que llega y se expande por el ámbito social, integrándose de manera casi imperceptible en los marcos de vida cotidiana más diversos. El ChatGTP la llevó a la superficie y las posturas sobre la IA se encuentran polarizadas. De ahí la importancia de conocer a fondo el contexto desde el cuál surge. Será fundamental, en consecuencia, analizar además de sus funciones y alcances, las preguntas pertinentes que debemos formularnos para comprender su naturaleza y la manera como nos puede llegar a ayudar.