Las bibliotecas jesuitas se constituyeron de acuerdo con las disposicionesoficiales de la Orden, sus documentos fundacionales y reglas específicas para el tratamiento de los libros. Al mismo tiempo, las condiciones de cada asentamiento plantearon necesidades especiales en materia de libros que reconfiguraron las formas de la biblioteca modelo en la Compañía de Jesús. El artículo propone una tipología para clasificar estas bibliotecas, conforme los géneros que componían su acervo de acuerdo con la vocación apostólica de sus lugares de asiento.