Los ingenieros militares nacen con la humanidad y se prolongan en el tiempo realizando la misma misión con las adaptaciones que obliga el paso de los años. El Estado colombiano nunca ha tenido una proyección estratégica en su limitado desarrollo, pero tiene que cambiar de actitud en aras de poder sobrevivir. Estamos en el momento histórico para prepararnos y proyectarnos. La misión principal de los ingenieros ha sido y será el apoyo de combate, pero se deben aprovechar sus capacidades orientadas al desarrollo nacional y el apoyo a la comunidad. Con miras al logro de lo anterior, se requiere capacitación y exigencia, a fin de estar listos para adaptar el arma al futuro; adoptando nuevos roles, desarrollando otros perfiles y coadyuvando en el control del territorio patrio con el propósito de que éste no pueda ser ambicionado por ninguna amenaza interna o externa.