El artículo expone el lugar central de las emociones en la propuesta educativa de Trabajo Social de la universidad del Quindío, específicamente en los espacios académicos Trabajo Social Contemporáneo II y III, destinados a la formación para la praxis profesional con sujetos y familias. Se plantean los aportes de las pioneras que dan soporte a esta apuesta formativa, y las estrategias de enseñanza-aprendizaje implementadas para concretarla en el abordaje de las dimensiones de la disciplina-profesión, desde un compromiso con la reflexividad de las(os) estudiantes de sí mismas(os) como sujetos, con emociones construidas y transformadas en interacciones significativas, como las familiares.