Este artículo presenta a la logopedagogía, como una propuesta para volver la mirada hacia la persona - estudiante. Se rescata el rol del educador, como quien puede ayudarle a encontrar un sentido para vivir y, quien puede incidir en el desarrollo de habilidades para la vida. Partiendo de una concepción relacional del ser humano, se evidencia algunas enseñanzas fundamentales que el docente puede incluir en su práctica pedagógica, a fin de contribuir a la formación de una persona en relación consigo misma, con el otro, con los otros, con lo otro y con el Otro. Lo anterior requiere incorporar en el currículo y en los planes de estudio, programaciones contextualizadas y pertinentes a las necesidades de los niños, niñas y adolescentes que educamos.