A partir de la definición de los registros de lo imaginario y de lo real que es dada en 1974 por Lacan, podemos establecer una articulación bastante simple —según el “ideal de simplicidad” que él aspiraba para su enseñanza— y precisa: lo imaginario es simplemente el sentido; y lo real, dice Lacan, es “el envés de lo imaginario”, es el no sentido, el sentido en blanco, el sentido ausente. En el texto “Nomina non sunt consequentia rerum”, Lacan precisa a ese respecto que: “Hay una cosa que, de todas formas, es cierta, si es que alguna cosa pueda serlo, es que la idea misma de real comporta la exclusión de todo sentido. No es si no en la medida en que lo real es vacío de sentido que nosotros podemos aprehenderlo un poco […]”.
Tópico:
Comparative Literary Analysis and Criticism
Citaciones:
0
Citaciones por año:
No hay datos de citaciones disponibles
Altmétricas:
0
Información de la Fuente:
FuenteRevista Affectio Societatis/Affectio Societatis