Introducción: los Signos Neurológicos Blandos han sido definidos de forma general como posibles predictores de patologías neuropsicológicas en niños mentalmente sanos y por ende posibles generadores de desfases en el desarrollo neuromadurativo, se pueden llegar a identificar en edades escolares y pueden aparecer como indicadores en el desarrollo que muestran un patrón deficitario y tiene un pronóstico evolutivo negativo en algunas ocasiones.
 Objetivo: Comparar la Madurez Neuropsicológica y la presencia, ausencia de Signos Neurológicos Blandos en niños de 5 y 6 años escolarizados.
 Método: se plateo un estudio comparativo, con diseño no experimental, de corte transversal. Se utilizo el Cuestionario de Madurez Neuropsicológica Infantil (CUMANIN) y el anexo de signos neurológicos blandos de la Evaluación Neuropsicológica Infantil (ENI).
 Resultados: se obtuvieron diferencias estadísticamente significativas en las escalas de psicomotricidad, viso percepción, ritmo, fluidez verbal, desarrollo no verbal, desarrollo total y cociente de desarrollo. Se pudo evidenciar resultados por debajo de la media en el grupo con signos neurológicos blandos en las escalas de lenguaje expresivo, ritmo, fluidez verbal, atención, desarrollo verbal y desarrollo total.
 Conclusiones: los participantes presentan un nivel de madurez neuropsicológica promedio, evidenciándose que la presencia de signos neurológicos blandos afecta la madurez neuropsicológica y esto tiene repercusiones en el desarrollo de las áreas verbales y no verbales.