En el Resguardo Santa Clara, en el municipio de Ricaurte, la plantación de coca (Erythroxylum coca) constituye una de las actividades económicas más importantes, que genera un impacto negativo en el suelo, aumenta el transporte de sedimentos, causa pérdida de cobertura vegetal, al igual que una baja concentración de nutrientes esenciales, por lo cual se aplicó una enmienda orgánica a base de porquinaza, con el propósito de estudiar sus efectos hacia los procesos erosivos causados por estos cultivos, en aras de lograr un mejoramiento de las propiedades fisicoquímicas del suelo.La aplicación de la enmienda se realizó teniendo en cuenta dos usos de suelo con condiciones de pendiente alta; se ejecutó un muestreo cada mes durante tres meses; además, se tuvo en cuenta la metodología de parcelas de escorrentía para el control de la erosión; a raíz de esto, se determinó que el suelo control presentó mejores condiciones en comparación al suelo degradado; sin embargo, cabe resaltar que este último no mostró unas condiciones fisicoquímicas totalmente degradadas. Lo anterior se logró determinar a partir del estudio de diferentes parámetros fisicoquímicos que permitieron evidenciar que el suelo control presenta contenidos de materia orgánica con un promedio de 11,43 %, considerado como un suelo con alto porcentaje de esta; del mismo modo, se obtuvo pH menores a 7, por lo que se toma como suelo ácido y no salino. Los resultados obtenidos de la capacidad de intercambio catiónico (CIC) demostraron que el suelo degradado presentó un mayor valor de CIC, (29,44 meq/100g) en comparación con el suelo control (29,20 meq/100g), por la relación que existe entre la CIC y las partículas que conforman la textura del suelo, puesto que, el suelo control corresponde a una textura areno franco, mientras que el suelo degradado comprende una textura franco arenosa.