Los intereses marítimos, entendidos como el conjunto de beneficios de carácter político, económico, social y militar que obtiene un Estado de todas las actividades relacionadas con el uso del mar, demandan cada día una mayor participación de la academia, el sector productivo y el Gobierno nacional. Posibilitar esta estrategia asociativa, académico-empresarial y gubernamental, arroja como resultado pilares fundamentales para fomentar la investigación, la ciencia, la innovación y el uso de tecnologías mediante la interacción de una tríada denominada el Triángulo de Sábato.