En 1994 se presentó una invasión de la langosta llanera Rhammatocerus schistocercoides (Rehn) en los Llanos Orientales de Colombia, constituyéndose en una amenaza potencial para cultivos como arroz, sorgo y caria de azúcar. De acuerdo con el potencial que el control biológico representa, el objetivo del presente trabajo fue el de seleccionar, mediante ensayos de laboratorio y campo, cepas nativas de Metarhizium anisopliae (Metschnikov) para el control de la langosta llanera. En laboratorio (28°C y humedad relativa 70%) se evaluaron, a una concentración de 1x108 conidios/ ml, 3 cepas nativas de M. anisopliae (M3, M5 y M11) sobre ninfas de octavo ínstar. La cepa M5 produjo un 100% de mortalidad al día once, mientras que las cepas M3 y M11 produjeron el 100% de mortalidad al día trece. Posteriormente, a las tres cepas se les determinó la dosis letal media. Mediante el programa probit, se encontró una DL50 de 5 conidios/ insecto para la cepa M5, y de 7 conidios/insecto para las cepas M3 y M11, no siendo significativas estas diferencias (f=0.78; g1=4; p<0.05). Las 3 cepas nativas fueron evaluadas en campo, en Carimagua-Meta, (36°C y H.R 56%). Para tal fin, se sometieron a un proceso de producción masiva y formulación mediante la encapsulación de los conidios con protectores de luz ultravioleta. El ensayo se realizó en jaulas que contenían langostas adultas; a un grupo se les asperjó una suspensión del hongo formulado y a otro lote se les asperjó una suspensión del hongo sin formular (conidios desnudos). Se aplicaron dos concentraciones (1x107y 1x108 propágulos/ml) por medio de una bomba de ultra bajo volumen. Al décimo séptimo día de iniciado el ensayo se obtuvo un porcentaje de mortalidad en las langostas del 67.8%, 64.1% y 56.5% cuando se utilizaron las cepas formuladas MS, Mily M3, respectivamente. Estos resultados fueron significativamente diferentes (f=4.66; g1=12; p<0.05) a los obtenidos cuando se utilizó el hongo en forma de conidios desnudos, en donde se obtuvieron porcentajes de mortalidad de 9.5%, 26.4% y 28.2% para las cepas M5, M11 y M3, respectivamente. Estos resultados permitieron demostrar que la formulación no afectó la actividad entomopatogénica del hongo y le confirió tolerancia a los conidios bajo condiciones de campo.