La Facultad de Diseño Gráfico de la Universidad Santo Tomás realiza anualmente el Encuentro de Investigación en Diseño, que del 2 al 4 de octubre de 2019 celebró su séptima versión, evento que en nuestra Facultad se ha venido consolidando durante estos siete años. En ese entonces, reflexionamos acerca de la función social del diseño, sobre la labor de nuestra disciplina en la vida y los problemas cotidianos, una reflexión a partir del diálogo académico sobre la relación epistemológica, metodológica y práctica con las ciencias sociales, las artes y las humanidades, antes del Covid-19. En ese entonces, nuestro interés fue fortalecer la discusión a partir de las experiencias en procesos investigativos y de intervención social en los que el diseño participa. Un año después el mundo, los problemas cotidianos y la vida de todos ha cambiado drásticamente, lo cual ha requerido un gran esfuerzo de nuestra parte para adaptarnos a esta nueva vida en aislamiento. Las formas de comunicación, la educación, la interacción humana y la vida en común requieren cada día, nuevos aportes de nuestra parte. Estas memorias son resultado de esta reflexión sobre una normalidad de la que no eramos conscientes y a la que tal vez no regresemos. Hoy, un año después, nos permiten revisar y complementar la discusión de la que en ese entonces participamos. En este séptimo encuentro, el eje de la discusión fue el lugar que ocupa el diseño en los procesos de transformación e innovación social, definido por Manzini (2016), como “todo aquello que el diseño puede hacer para fomentar y apoyar la innovación social, para hacer sus resultados ampliamente accesibles y su significado más rico y profundo” . Dentro de esta definición, identifica al menos tres maneras básicas del diseño para la innovación: Design activism Design with communities Design for favorable eco-systems