Desde la independencia de las Américas hasta hoy, sorprende lo mucho que han progresado los modos técnicos de producción y lo poco que lo han hecho los propósitos subyacentes a su uso por el poder, un recorrido histórico que confirma, después de dos siglos, la vigencia actual de los discursos y de las acciones en el campo de la educación popular. Desde esta premisa, el artículo reconoce las desigualdades sociales que la pandemia de covid-19 profundizó que comportan renovados desafíos para la educación popular, particularmente de cara a la llamada revolución digital.