A través de una lectura del libro de Jonás, la monografía explora los posibles aportes del Sacramento de la Reconciliación para acercar a las poblaciones urbanas a una verdadera reconciliación con la creación. La ciudad se presenta como un lugar de promesa y de peligro, ya que disfruta de una consciencia social y ambiental, pero, a la vez, no suele reconocer su propia alienación del mundo natural, porque la tecnología de la ciudad oculta las consecuencias de su consumo de los bienes de la tierra. La obra pone en evidencia la necesidad y la eficacia de la penitencia, que es capaz de cultivar una conversión ecológica, si se da de una manera adecuada. Por eso, se plantea una serie de sugerencias para actualizar el sacramento y hacerlo más pertinente a la vida urbana y a la época de extinción masiva provocada por los seres humanos.