El Sistema General de Pensiones en Colombia fue creado con el objetivo de garantizar a la población el amparo en la vejez y ante las posibles eventualidades tanto en la invalidez como en la muerte. Todo fue plasmado consagrado con la expedición de la Ley 100 de 1993, estipulando allí un sistema que funcionaria bajo un esquema compuesto por dos regímenes solidarios: el Régimen de Prima Media con Prestación Definida (RPM) y el Régimen de Ahorro Individual con Solidaridad (RAIS). Se creó así una competencia en la búsqueda de captar afiliados, promoviéndose cada uno con los beneficios y ventajas que ofrece para lograr la mayor captación de afiliados. A pesar de todo, y las modificaciones legales realizadas, el sistema sigue siendo inequitativo por muchos factores.