La situación actual demanda retos significativos para la Universidad, toda vez que, se muestra la importancia de las instituciones de educación, las cuales son fundamentales para la sociedad a partir de las respuestas a los problemas sentidos, tales como los originados por la pandemia, los de orden económico y la confianza social. De tal manera que, la Universidad se manifiesta no solo como un espacio físico, sino en un concepto más amplio donde los miembros de la comunidad académica interactúan con los actores nucleares de la sociedad para dar respuesta adecuadas a problemas de orden regional y nacional. Se reclama oportunidades de empleo, mayor educación y de calidad y es aquí donde la articulación del estado, la universidad y la empresa es imprescindible.