La tradición filosófica se ha aproximado al hombre en términos universales y abstractos. Este articulo explora la posibilidad filosófica de tantear al hombre de manera más concreta desde la especificidad de su sexualidad recurriendo al pensamiento de Julián Marías, quien incorpora en la filosofía las categorías y las reflexiones en torno a la condición sexuada y la existencia de la “persona masculina” y la “persona femenina” como dos modos en que deviene la persona.