Resumen: El paradigma de desarrollo humano ha tenido amplia aceptación.Sin embargo ha sido el enfoque blando -restringido a la puesta en marcha de políticas sociales que contribuyen a la expansión de ciertas capacidades básicasque el enfoque duro -que implica reformas redistributivas-el que más se ha tenido en cuenta.Aunque la equidad en la distribución de los medios (ingreso y riqueza) no es la medida más apropiada de la justicia económica ya que ésta no garantiza la equidad en el logro de los fines de los individuos, eso no quiere decir que no sea una condición necesaria.Una concepción dura del desarrollo humano es necesaria para la expansión de capacidades como la de aparecer en público sin sentimiento de vergüenza (Smith).El carácter extremo de las desigualdades en América Latina hace aún más necesario recuperar