Hoy en día es usual escuchar que las finanzas son muy complejas y que no son para todo el mundo. Esto se pone en evidencia cuando se escuchan expresiones como “¡eso es tan difícil!” o “sufrí mucho con esas materias en la universidad”; en síntesis, para muchas personas las finanzas son como el lobo en el rebaño que anda en busca de una presa.