Desde finales del siglo XV, cuando se propuso explícitamente por escrito la ecuación contable de Lucca Pacioli, a través de su trabajo de matemáticas Summa de Arthmetica, Proportioni et Proportionalita, hasta nuestros días en los albores del siglo XXI, es muy poco lo que ha cambiado epistemológicamente este constructo. En este artículo se demostrará que dicha ecuación contable clásica es un caso particular de la ecuación contable de patrimonios.