El propósito de este artículo es presentar una discusión en torno al por qué los procesos de comprensión lectora y producción escrita deben estar ligados a las emociones. Se planteó como metodología un estudio con un enfoque mixto, y un carácter longitudinal; los sujetos de estudio fueron estudiantes del grado quinto, en edades comprendidas entre nueve y doce años, pertenecían a la Básica Primaria dos Instituciones Educativas del municipio de Rionegro, en el departamento de Antioquia. El hallazgo más significativo fue reconocer la importancia de abordar la lectura y la escritura desde las emociones; pues cuando estos procesos están permeados por el gusto e interés de los estudiantes, se activa la participación como parte elemento dinámico del aprendizaje.