Introducción: En la relación médico-paciente, la comunicación es un elemento esencial, y una herramienta útil para ello es aplicar la programación neurolingüística. El terapeuta logra igualar la forma en que un paciente piensa, habla y actúa, por lo que la comunicación se vuelve más clara, con menos riesgo de confusión. Método: Se realizó una revisión narrativa, mediante una búsqueda sistemática en las principales bases de datos médicas y de psicología, utilizando los términos MEsH y operadores lógicos Physician-Patient Relations [MeSH] and Neurolinguistic Programming [Mesh], y términos DeCS programación neurolingüística and comunicación. También se buscó manualmente la literatura en libros publicados relacionados con el tema. Conclusiones: Todas las personas tienen diferentes formas de representar el mundo. Esto se hace mediante diferentes canales de comunicación, auditivo, cinestésico y visual. Para cada una de estas representaciones existen unos predicados específicos, y la confianza se genera cuando el terapeuta acompaña a su paciente en su sistema representacional y cambia sus predicados para igualarlos con los de él. Esto es, en esencia, hablar en el lenguaje del paciente, que permite modelar cualquier comportamiento humano y establecer una alianza terapéutica.