En este artículo, Vaccaro pretende interrogar el valor político de la verdad. Partiendo de Hannah Arendt y del debate entre modernidad y posmodernidad, el artículo se centra en la Voluntad de verdad según la elaboró Nietzsche, pero también en el primer curso de Collège de France de Foucault en los años 70. La tesis es una etopolítica de decir la verdad, es decir, la parresia, como antídoto tanto contra la aniquilación de la verdad por parte de la posverdad, como para el fortalecimiento de la verdad como lo Uno de la política.