El estudio de las prácticas funerarias expresadas a través del tiempo en un mismo territorio permite abordarlas desde una perspectiva patrimonial, en donde las tensiones que generan los comportamientos de diversos grupos frente a la muerte activan procesos de valoración y apropiación de un espacio que sintetiza, como pocos, la memoria histórica, las creencias religiosas y las transformaciones sociales de la población de Soacha (Cundinamarca). El cementerio municipal de Soacha, además de ser el escenario de tensiones, permite explorar las nuevas manifestaciones en torno a la muerte y la larga tradición indígena de este territorio, ocupado desde tiempos remotos de forma ininterrumpida por más de 10.000 años. El recorrido histórico, por lo tanto, permite llevar a cabo reflexiones desde el patrimonio cultural y la memoria de un territorio.