Innovar se entiende como un cambio que incluye algo nuevo, diferente a lo convencional. En el campo de la enseñanza de las lenguas extranjeras se han planteado diferentes propuestas para hacer una clase distinta a lo tradicional. Propuestas que van de lo didáctico, con métodos basados en la adquisición de diferentes competencias del habla, uso de material auténtico y representación de situaciones comunicativas de la vida diaria; a la mediación de la tecnología durante el proceso formativo. No obstante, para innovar tenemos que considerar varios elementos que se deben articular en torno a un fin común: el desarrollo académico, profesional y humano del individuo; por consiguiente, la institución, el docente y el estudiante deberán asociarse y asumir un rol y un compromiso en el proceso. De esta manera, la innovación cambiaría de paradigma y se convertiría en el eje para hacer cambios estructurales en el ser humano y la sociedad.