A pesar de la importancia que tiene la educación jurídica en el fortalecimiento del Estado de derecho, en Colombia se ha investigado poco sobre este tema. Este artículo se propone ayudar a remediar ese vacío analizando la educación jurídica colombiana a la luz de los casos de Alemania, Estados Unidos y México. El modelo de educación jurídica alemán se caracteriza por una fuerte regulación estatal; el estadounidense, por los fuertes controles por parte de la profesión, y el mexicano, por la desregulación y el predominio del mercado. Colombia tiende a parecerse a este último modelo. El artículo plantea que la actual educación jurídica colombiana no es una fatalidad, sino el producto de opciones concre- tas que elegimos hace décadas. Esas opciones han sido con frecuencia nocivas, pero son reversibles si aprendemos de las lecciones valiosas de los modelos de otras latitudes.