El cáncer es un importante problema de salud pública en todo el mundo. Las características demográficas mundiales predicen una incidencia creciente en las próximas décadas, lo que constituye un reto para los países que deben avanzar en el desarrollo de estrategias para promover una atención continua que integre las acciones de prevención, detección temprana, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación y cuidado paliativo que lleven a reducir carga de la enfermedad. Actualmente la atención del cáncer a nivel mundial está caracterizado por el desarrollo de centros integrales de atención como estrategia para desarrollar un sistema de atención asequible, equitativo y de calidad, mostrando un impacto significativo en el avance del control del cáncer y en la mejora de la salud de sus poblaciones, ya que no solo comprenden recursos humanos y técnicos especializados, sino que fortalecen la capacidad del sistema de salud con el establecimiento de las mejores prácticas en el manejo clínico, el desarrollo de la investigación y la formación del talento humano del país.