En sentido amplio un agente es un ser que tiene la capacidad de actuar, y la agencia es la manifestación de tal capacidad. Actuar puede ser definido de forma negativa como aquello que hacemos a diferencia de aquello que nos pasa (Wilson y Shpall, 2016). Sin embargo, es en cierto sentido muy difícil entender la delgada línea roja que limita una simple actividad controlada de una actividad controlada y dirigida. Por estos motivos, la filosofía contemporánea ha descrito y analizado dicho fenómeno desde dos perspectivas, a saber, aquella que concibe la acción fundamentada en el concepto de intencionalidad, denominada también teoría estándar de la acción, y, por otro lado, la concepción según la cual existe la posibilidad de adscribir agencia genuina a seres carentes de intencionalidad (Schlosser, 2015)
Tópico:
Neuroethics, Human Enhancement, Biomedical Innovations