Como los últimos empréstitos del Perú se levantaron a base de la pignoración de los yacimientos guaneros, y sólo pudieron ser emitidos en razón de una errónea idea de la cantidad existente, la aplicación de este dinero pertenece, pues, a la historia del guano. La falta de medios de transporte y las dificultades de las condiciones del suelo, fueron en todo tiempo los impedimentos principales que se oponían al desenvolvimiento económico del Perú, desde siempre.